El Qi Gong es como los árboles y las plantas, flexibles y enfilando hacia el cielo, pero bien arraigados a la tierra. Es quietud y conexión, pero también movimiento y expansión. Es relajamiento, energía y presencia, es eje, equilibrio, cuerpo y espacio, es fluir.
El Qi Gong te alinea arraigándote energéticamente entre cielo y tierra. Tiene enormes beneficios sobre la salud física, mental, emocional y espiritual. Está pensado para aportar o hacer crecer el qi o el aliento de vida; es decir, la energía, en el cuerpo. Regulando la energía del cuerpo, se regula la energía y la función de los órganos y de los meridianos. De esta forma los canales o meridianos de energía vuelven a fluir y la persona se siente más relajada, más centrada y al mismo tiempo más energetizada, con más vitalidad.
A través del Qi Gong podemos recuperar nuestro ritmo natural, nuestro equilibrio, y nuestra salud física, mental y emocional.
Clase impartida por Ester Calbet, sanadora y profesora de Qi Gong.